Tras la puesta en común de las personas que integran la coalición Más Madrid –
Verdes Equo Alcalá, las formaciones llegan a la conclusión de que las Ferias en
este 2024 han dado un paso para atrás, aunque también se ha extraído alguna
conclusión positiva.
En primer lugar, apuntan desde la coalición, que las “consumiciones, conciertos y
viajes en las atracciones del ferial están adquiriendo unos precios desorbitados”.
Desde Más Madrid – Verdes Equo Alcalá señalan que “no es de recibo pagar 4.5
euros por un tercio de cerveza (más el euro del vaso), al igual que entre 4 y 5 euros
por un viaje en cualquier atracción o los 30 euros que, como poco, costaba alguno
de los conciertos pasados y por venir en la muralla. Estos precios suponen una
regresión en el carácter popular de estas fiestas y la alejan de la ciudadanía media”,
a lo que añaden, “no se ha producido ningún cambio que aumente el atractivo para
el público del recinto ferial”.
Tal y como señala Rosa Romero, portavoz de Más Madrid – Verdes Equo en el
Ayuntamiento complutense: “Alcalá necesita unas ferias que ilusionen a la gente y,
tras las de 2024, tenemos la certeza de que este Gobierno no las va a propiciar. Por
falta de ideas, por falta de valentía y por su modelo de ciudad”.
Por otro lado, la coalición verde señala la incoherencia con la política de los vasos
de plástico reutilizables. “Es del todo disfuncional”, apuntan, “que el vaso que
adquieres en el Ferial no servía para la “Feria de Día” ni para los Conciertos de La
Muralla. Este tipo de medidas responden más a un lavado de imagen con la excusa
del reciclaje que una apuesta real por unas ferias ecosostenibles”.
Por último, desde Más Madrid – Verdes Equo Alcalá muestran su “escepticismo en
relación a los datos globales propiciados por el Gobierno local en materia de
seguridad”, cuestionando “algunas prácticas más que dudosas, como los cacheos y
retenciones selectivas por criterios raciales”. Además, señalan que “en el pregón
hubo varias fallas en la seguridad de acceso, donde se desplegaron bengalas de
fuego. Estas fallas se extienden al recinto ferial, en el cual no se instalaron los
botones de emergencias ni en el punto violeta ni en los baños móviles instalados en
el mencionado espacio”.
“La movilidad en la ciudad y sobre todo en las zonas cercanas al centro y al recinto
ferial tampoco ha experimentado cambios respecto a otras ediciones, sufriendo
estas zonas una mayor presión de tráfico rodado. Se deben fomentar alternativas al
vehículo particular todo el año y durante las ferias más”.
Además, desde Más Madrid – Verdes Equo Alcalá apuntan que, “con la excusa de
la prohibición del botellón, el uso y el disfrute de algunos parques y jardines de
algunas zonas de la ciudad, quedan drásticamente reducidos, aplicando una lógica
restrictiva que consideran injusta para los usuarios e ineficiente ya que el botellón se desplaza de lugar, pero se sigue realizando”. Rosa Romero, añade también:
“sabemos que al Gobierno local la emergencia climática le importa poco, pero no
esperábamos que la excusa de la Feria y los botellones fueran a ser pretexto para
cerrar parques y jardines, donde la ciudadanía se refugia de las altas temperaturas
que hemos visto este final de agosto”. Prosigue Romero: “Este año se ha visto cómo
la afluencia de público en la “Feria de Día” y en el Recinto Ferial era mucho menor
que otros años, y creemos que se debe a dos factores: miedo por el alarmismo
calificando nuestras ferias como inseguras y los precios nada populares”.
Como conclusión positiva la formación destaca la “recuperación de Los Conciertos
de La Paloma, aunque se haya cambiado de denominación”.