Alcalá, 20 de enero.- Por primera vez en la historia un obispo de la iglesia católica bendecirá a los animales en la festividad de San Antón en Alcalá. Será mañana domingo 21 de enero cuando el obispo complutense, monseñor Antonio Prieto presidirá a las 12 horas del mediodía la misa de la hermandad de San Antón, en la iglesia del convento del las carmelitas de la calle Imagen, y a la una y cuarto de la tarde bendecirá a los animales en la calle Mayor, a la altura de la iglesia del hospital de Antezana.
Así pues mañana se inicia el calendario festivo complutense tras la Navidad con la celebración de la festividad de San Antonio Abad y la bendición de los cientos de animales que desfilarán por la calle Mayor en una pasarela que reunirá a las más variadas mascotas, animales de compañía para los que ese es su día, gracias a la hermandad de San Antón y su infatigable capellán, Manuel Palero. Pero este año la novedad va a ser la presencia del obispo complutense, quien coincidirá en la bendición con l alcaldesa, Judith Piquet y con el concejal de Medio Ambiente, Vicente Pérez Palomar. Es curioso que aun siendo una bendición multitudinaria, está alejada del animalismo como corriente que en estos momentos está de plena actualidad. Este entrañable acto siempre se realiza en Alcalá el domingo más próximo y posterior a la festividad de San Antonio Abad que es el 17 de enero, a diferencia de lo que ocurre en Madrid, en la iglesia de San Antón en la que es párroco el padre Ángel García, de Mensajeros de la Paz. Allí la bendición siempre se realiza el mismo día 17 de enero.
A partir de la una y cuarto de la tarde, el obispo complutense asperjará el agua bendita a cientos de mascotas a las que sus dueños llevarán para que el santo las proteja como criaturas de Dios que son. Estamos por tanto ante un acto de indudable sentido religioso, pero al mismo tiempo con un inconfundible elemento social en su celebración puesto que muchos aprovechan el día para mostrar sus mascotas y hacerlas participar en un acto público. Debido a la concentración de personas que llevan sus animales y de muchos otros para quienes es un placer asistir como espectadores a esta fiesta, lo ideal es seguir las indicaciones de la Policía Local y de Protección Civil para ubicarse con seguridad en la calle Mayor. Hay que tener en cuenta que habrá bendición de caballos y eso siempre puede entrañar algún riesgo.
La fiesta de San Antón tiene diversas particularidades y elementos que confluyen en algo tan entrañable como es el cariño que miles de personas dan a sus mascotas arrancando de una tradición que procede de tiempos pasados y que tiene que ver con ritos de una sociedad rural en el que los animales eran fundamentales para la subsistencia.
El ecologismo, en tanto defensa de la naturaleza y de sus criaturas, no es patrimonio exclusivo de movimientos sociales o políticos sino que mucho antes de la aparición de estos movimientos lo defendió la iglesia católica dando respuesta, dicho sea de paso, a los anhelos y necesidades de la sociedad. Evidentemente los animales para las sociedades rurales tenían una enorme importancia por ser fuente de alimentación y fuerza de trabajo. De ahí que existiera en tiempos antiguos ese amor por los animales, aunque fuera para comérselos o para hacerlos trabajar, algo evidentemente discutido en los sectores animalistas de la sociedad actual.
Santos ecologistas
El eremita egipcio San Antonio Abad, que nació a mediados del siglo III después de Cristo es un ejemplo de vida ligada a la naturaleza y a los animales de ahí que la iglesia le nombrara patrono de los ganaderos, de los veterinarios y protector de los animales. Pero si hay un santo ecologista por excelencia ese es San Francisco de Asís, cuyo legado ecologista es el haber predicado que el ser humano debe repensar su lugar en el orden creado de modo que el bienestar humano está integrado en el bienestar de todas las cosas. El bellísimo Cántico de las Criaturas franciscano es un manifiesto de defensa del medio ambiente de primer orden. “Alabado seas, mi Señor, por la hermana nuestra madre tierra, la cual nos sostiene y gobierna y produce diversos frutos con coloridas flores y hierbas”.
También se considera santo ecologista a San Isidro Labrador, pero el amor de San Antonio Abad por los animales le ha hecho ser considerado el patrono, el santo protector de los mismos. Esto y el esfuerzo de su hermandad en Alcalá por mantener esta centenaria tradición, hace de la fiesta una de las más entrañables que hay en el calendario festivo de la ciudad.
Fue el semanario PUERTA DE MADRID quien acuñó hace años la expresión de que por San Antón la calle Mayor de Alcalá se convierte en una pasarela en la que se lucirán más de medio millar de mascotas para recibir la bendición ante la imagen del santo protector de los animales. Se trata de una expresión que ha triunfado como lo ha hecho la fiesta en sí misma, y ahí la labor de divulgación realizada por PUERTA DE MADRID a lo largo de los años ha sido también muy importante. Es cierto que aun siendo la fe lo fundamental en esta fiesta es indudable que tiene un indudable e importantísimo carácter social.
Desde la hermandad, se acostumbra a pedir a los asistentes que traten de dejar libre la calzada de la calle Mayor, ya que en primer lugar se realizará la bendición de los caballos para evitar ante las aglomeraciones que suelen producirse, que se produzca algún accidente.
Lo mismo que otros años, la Policía Local complutense dirigirá a las caballerías a los Santos Niños y a la plaza de Palacio a fin de concentrar allí al más de un centenar de equinos que se esperan. Desde allí los dirigirán todos juntos a la bendición y los sacarán de la calle Mayor de forma efectiva.
Una vez bendecidos los caballos llegará el momento de la bendición de las mascotas para dar por terminada tan entrañable fiesta.