‘Isabel I de Pantoja’ reina en la Muralla complutense de la emoción; 1.600 espectadores asistieron al concierto en Alcalá de Henares, cuarenta años después de la muerte de Paquirri y a los tres días del fallecimiento de Julián Muñoz. Zambombazo para poner, a falta del concierto de Sergio Dalma, el broche de oro al ciclo de espectáculos en el recinto amurallado complutense.
Alcalá de Henares, 28 de septiembre de 2024.- Isabel Pantoja hizo ‘sonar a Alcalá en toda España e incluso en Hispanoamérica con su concierto de anoche en la Muralla, en la Huerta del Palacio Arzobispal. Mejor colofón no podría tener el ciclo de Los Conciertos de la Muralla, y no tanto por el número de espectadores que hubo, 1.600, sino por la repercusión mediática y la trascendencia del primer concierto de la tonadillera tras la muerta del que fuera su pareja, Julián Muñoz, y al cumplirse los 40 años de la muerte de su marido, el torero Francisco Rivera ‘Paquirri’ tras la cornada sufrida por el toro ‘Avispado’ en Pozoblanco (Córdoba).
Justo es también decir que la cantante sevillana no se está prodigando mucho en conciertos, que elige muy bien los lugares en los que cantar y que sus espectáculos son un acontecimiento. No es extraño que los precios de las entradas sean altos. Hay que tener en cuenta que Isabel Pantoja no es sólo una cantante al uso, mueve una completa orquesta y ofrece un espectáculo de gran formato.
Por tanto la presencia de ‘Isabel I de Pantoja’ en Alcalá ha sido todo un éxito que se apunta la productora ‘Emotional Events’ y el promotor artístico José Antonio Torrano para poner la guinda a los Conciertos de la Muralla, insistimos que antes de celebrarse el último espectáculo, el de Sergio Dalma. La emperatriz Isabel Pantoja es, sin duda alguna, la reina de la copla, la reina de corazones y la reina de la emoción, y dentro de su imperio ha puesto una pica en la Muralla de Alcalá de Henares con un concierto brillante, lleno de calidad como espectáculo. Y con el desgarro emocional de una diva que transmite a su público.
Cada gesto y cada palabra cuentan
Claro está que todo gesto, toda frase dicha por la cantante sevillana está sujeto a las interpretaciones que de ellos hagan sus seguidores, sus seguidores y la prensa del corazón. Y que el momento del concierto -hasta para eso le sonrió la suerte a Alcalá y al ciclo Los Conciertos de la Muralla- era llamativo.
La de Isabel Pantoja era actuación muy esperada, ya que se trataba del primer concierto de la artista tras la muerte de su expareja, Julián Muñoz, con el que mantuvo una relación de 2003 a 2006.
El que fuera alcalde de Marbella de mayo de 2002 a agosto de 2003 falleció el 24 de septiembre debido a un cáncer de pulmón que padecía desde hace tiempo y que no pudo superar.
Nada más conocer el fallecimiento de Julián Muñoz, según la prensa rosa Isabel Pantoja, reaccionó de manera muy fría a la muerte del político condenado a pena de cárcel tras la operación Malaya como la propia tonadillera, y llegó a decir que le daba igual, que no le importaba nada.
Por eso unas palabras de la tonadillera en el escenario de la Muralla sembraron el desconcierto e hicieron preguntarse a muchos qué había detrás de ellas. Antes de cantar el tema ‘Donde el corazón me lleve’, lanzó un mensaje críptico abierto a no pocas interpretaciones: “Tengo muchos defectos como todo el mundo y virtudes también. (…) Como he dicho, como todo el mundo, soy humana. Siempre me decía mi madre: ‘Maribel, piensa, tienes que pensar un poquito más las cosas, mi alma’. Y la verdad, ¡qué sabia! Pero yo nada. Este (el corazón) ha mandado siempre y para bien, regular o mal, siempre he ido donde el corazón me lleve”, indicó Isabel Pantoja antes de interpretar su famosa canción.
La segunda reflexión que hizo en Alcalá fue Paquirri del que dijo que a pesar de los 40 años transcurridos desde su muerte, sigue acordándose de él”.