Todavía quedan atracadores de bancos y eso es lo más llamativo de una noticia que sorprende y que no está de más informar de ella por lo llamativa que es. Esta no es otra que la detención por parte de la Policía Nacional del presunto autor de varios atracos a entidades bancarias, uno consumado y los otros en grado de tentativa, en Madrid. La existencia de un atracador de bancos abre algunas reflexiones.
Alcalá, 23 de mayo. – Agentes de la Policía Nacional han detenido a un atracador de
bancos que amenazaba a los empleados con la tenencia de explosivos.
Ocultaba el rostro con mascarilla y entregaba una nota manuscrita donde
indicaba las instrucciones a los empleados. Cometió dos hechos en la capital
madrileña en apenas tres días siendo arrestado cuando trataba de atracar una
nueva entidad bancaria.
Simulaba portar artefactos explosivos debajo de la chaqueta
La investigación se inició el lunes día 13 de mayo cuando un hombre entró en
una sucursal del distrito madrileño de Salamanca portando una nota escrita a
mano donde se podían leer las instrucciones para los empleados. Les
amenazaba con supuestos explosivos que portaba en el interior de la chaqueta
para conseguir en efectivo billetes de 50 euros. Una vez logró el botín huyó
inmediatamente del lugar.
Tres días más tarde accedió a otra sucursal del mismo barrio con idéntico
modus operandi, no logrando en esa ocasión sustraer nada y abandonando el
establecimiento rápidamente.
Una vez que los investigadores lograron la identificación de este varón
establecieron un dispositivo para su búsqueda. De esta forma consiguieron, el
pasado viernes, localizarlo cuando abandonaba una entidad bancaria donde no
pudo cometer otro atraco puesto que la caja estaba cerrada.
Por todo ello, se logró su detención siendo puesto a disposición de la autoridad
judicial como presunto responsable de dos delitos de robo con intimidación. Los
agentes localizaron en el interior de sus bolsillos una nota manuscrita como las
que utilizó en los atracos anteriores así como efectivo en billetes de 50 euros.
Lobo solitario y acuciado por las necesidades
Lo llamativo es que todavía queden atracadores de bancos y más teniendo en cuenta que las entidades financieras vienen realizando desde hace años importantes medidas de seguridad. Lo hacen precisamente para protegerse de los atracos, por lo que fuentes policiales aseguran que hoy un atraco a una oficina bancaria tiene una altísima posibilidad de estar abocado al fracaso. Y si ocurre finalmente lo más probable es que acabe con la detención del atracador.
Porque esta última es otra de las características del perfil de quien comete este tipo de robo con violencia o intimidación. Suele ser una única persona y no tiene nada que ver con el perfil de las bandas de atracadores que tuvieron su momento estelar en los años setenta y ochenta del siglo XX coincidiendo con el azote de la heroína.
El perfil de un atracador actual de bancos puede ser el de una persona acuciada por necesidades económicas que ve que puede tener alguna posibilidad de conseguir algo de dinero que le saque del apuro. Sueña con la posibilidad de que su actuación tenga éxito y salga del apuro; el problema es que no ve las inmensas posibilidades de acabar mal, como lo hizo el último gran atracador de bancos en España, Jaime Giménez Arbe, el Solitario, que cometió más de 30 atracos a mano armada en bancos, generalmente en localidades pequeñas. Asesinó a una pareja de guardias civiles y un policía nacional murió por el disparo de un compañero en un tiroteo con el Solitario. Sin embargo, delincuentes como éste, que cumple condena de 47 años, no son habituales
Además, la opción de atracar en oficinas bancarias de pequeñas localidades es cada vez más complicada porque también estas tienen importantes medidas de seguridad.