Alcalá, 24 de marzo.- Desastre en el Val. El Alcalá ha perdido en casa ante el CD Fútbol Tres Cantos; ha salido de los puestos que dan derecho a jugar el play off de ascenso y deja malas sensaciones. Son ocho jornadas las que quedan pero el Alcalá parece empeñado en dejarse puntos, y sin ganar en este tramo decisivo de la temporada, parece que va a ser más que complicado jugar el play off, tabla de salvación a la que agarrarse pero que exige una remada que hoy por hoy el Alcalá no parece tener. Sobrevuela el temor a un centenariazo y las caras de decepción entre los aficionados son cada vez más preocupantes.
El 1-2 han sido más que tres cantazos del Tres Cantos; ha sido una tormenta de pedrisco que ha podido destrozar los frutos de la siembra antes de su maduración.
Y no sólo tres cantazos en plena cara; lo peor es que han llegado en dos cantadas. Y eso que el meta visitantes se quiso sumar a la fiesta cantando a capella para que Barca robara el balón y marcara a puerta vacía a los seis minutos el 1-0. Pero ahí se ha acabado el Alcalá; ya no ha dado más de sí. Se puede decir que el portero tricantino ha remediado su grueso error parándolo todo a partir de ese minuto seis. Pero la realidad es que al Alcalá le ha vuelto a fallar la puntería.
Y si no estás acertado de cara al gol y encima en defensa cantas por soleares, pues a poco se puede aspirar. El empate a los 36 minutos ha sido fruto de un penalti en el que si el árbitro hubiera pitado falta sacando el derribo fuera del área, no hubiera ocurrido nada, pero si hubiera sacado tarjeta roja a De Felipe al hacer falta ante una ocasión manifiesta de gol, pues tampoco hubiera ocurrido nada. Sin embargo nada de eso debe empañar la cantada de la defensa del Alcalá al permitir que Andrés García recibiera el balón sólo tras un pase largo de Fuster.
El empate no era bueno para el Alcalá, pero mucho peor la derrota y esta llegó con otra cantada, la que permitió el remate a los 76 minutos de Simal sin que ningún defensa le interceptar. Ese remate o pase, que ni siquiera se sabe lo que era fue desviado por De Flipe que en un día aciago vio como el balón entraba en la portería rojilla.
Atacó el Alcalá, sí, pero a la falta de puntería se ha unido las intervenciones del portero para que el Tres Cantos gane un partido crucial, adelantando al Alcalá y viendo cómo también Las Rozas ha superado por golaverage a los complutenses.
Desastre y derrota amarga de un Alcalá que lleva tres jornadas sin ganar, sumando sólo dos puntos, y eso es muy poco si se quiere aspirar no al ascenso, sino a jugar para conseguir un ascenso que está muy cuesta arriba.