El sábado 11 de mayo se celebró en el Pabellón Municipal Demetrio Lozano-El Val
el III Campeonato de Judo de la Fundación Rodolfo Benito Samaniego. La mañana
amaneció con un tiempo inmejorable y allí se dieron cita más de 500 niños de
entre 5 y 12 años distribuidos en las categorías de pre-benjamines, benjamines y
alevines, tanto masculinos como femeninos. Muchos de ellos pertenecían a clubes
de Alcalá pero allí también acudieron niños de otros municipios de la comarca,
como Torrejón, Meco, Camarma, Daganzo y Villalbilla así como de Madrid y Parla.
El ambiente, festivo y deportivo, se iba contagiando a todos los participantes y espectadores según accedían al pabellón. La organización, increíblemente perfecta a pesar de la dificultad que entraña
trabajar con centenares de niños de corta edad, se distribuía en varios escenarios:
combates en los tatamis, entrega de medallas en el podio, un gran tatami de
calentamiento y varias mesas en las que los organizadores iban llamando a los
niños competidores. Un engranaje perfecto gracias a la profesionalidad y
experiencia de las instituciones colaboradoras: la propia Fundación Rodolfo Benito
Samaniego, la Federación Madrileña de Judo y Deportes Asociados, el club de judo
“Corredor del Henares”, el Ayuntamiento de Alcalá, la Ciudad Deportiva Municipal
y, como patrocinadora, la Comunidad de Madrid y el Ministerio del Interior.
El sistema de competición consistió en unas liguillas de cuatro competidores
organizados por orden de peso, con una diferencia máxima de dos kilos y
procurando que no coincidieran deportistas del mismo club. Con gran disciplina
los judokas esperaron pacientemente su llamada y, una vez convocados al combate
y tras los respetuosos saludos que impone el protocolo de las artes marciales, se
lanzaron a la competición. Mucha técnica, en algunos casos muy depurada,
deportividad y buen espectáculo fueron los obsequios que estos niños ofrecieron al
numeroso público asistente ,haciendo gala de una auténtica lección de humanidad
y madurez aún más llamativa por la temprana edad de los competidores. Las gradas estuvieron prácticamente llenas desde el primer combate, que comenzó a las 09:30 horas hasta el último, ya pasadas las dos de la tarde.
Concluidos los combates, era el momento del podio. Allí los jóvenes judokas
recibieron sus medallas, que lucirían orgullosos durante todo el evento… y mucho
más allá. De hecho, durante toda la mañana pudimos ver a los condecorados
deportistas por muchos rincones de Alcalá. Las medallas fueron entregadas, en un
simpático acto organizado alrededor del podio, por el equipo directivo de la
Fundación, la concejala de Educación, Lola López, y el concejal de Deportes, Víctor
Acosta.
Con esta iniciativa, la Fundación Rodolfo Benito Samaniego rinde un especial
homenaje al joven ingeniero industrial alcalaíno asesinado en los atentados
terroristas del 11 de marzo de 2004. Rodolfo fue un gran deportista y una de sus
pasiones fue, precisamente, el judo. Por ello se organiza este evento con el fin de
mantener su memoria, siempre desde un espíritu positivo y constructivo,
fundamentado en los valores de convivencia y tolerancia.
Este campeonato de judo cumple en 2024 su tercera edición con lo que se
consolida su carácter estable y anual. Su objetivo, aparte de promover el deporte
en general y el judo en particular como instrumento de unión, relación y respeto
entre las personas, es rendir un homenaje y mantener en el recuerdo a todas las
personas que son y han sido víctimas del terrorismo.