Comerciaba con tarántulas y otras especies peligrosas. La Guardia Civil detectó en el aeropuerto de Barajas un envío a través de una empresa de paquetería con arácnidos. Con la investigación llegaron a un centro en San Fernando desde el que se distribuían estos animales y en el que encontraron especies peligrosas y amenazadas de extinción.
Alcalá, 12 de junio.- La actuación tenía su origen tras detectar los equipos de seguridad elementos sospechosos en un paquete que declaraba contener copas de cristal, cuyo origen era San Fernando de Henares y como destino final Sevilla.
Los Agentes de la Guardia Civil, pertenecientes a la Unidad Fiscal y Fronteras del Aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas, procedieron a la inspección del paquete, donde detectaron, 15 envases de plástico conteniendo cada uno de ellos arácnidos,
conocidos como tarántulas.
Posteriormente se solicita al organismo competente el análisis de los animales por si pudieran estar incluidos dentro del Catálogo Internacional de Especies Amenazadas (CITES).
En concreto los especímenes localizados pertenecen a la especie Brachypelma Hamorii (tarántula de patas rojas), Brachypelma boehmei (tarántula mexicana de patas anaranjadas), Brachypelma Emilia (tarántula mexicana de patas rojas), Poecilotheria regalis (tarántula adornada de la India), Aphonopelma pallidum (tarántula mexicana gris) y Tlitocatl albopilosus (tarántula enchinada), todas
ellas incluidas en el apéndice II del CITES y consideradas potencialmente peligrosas.
Una vez constatados estos extremos, los animales fueron llevados a centros de la Comunidad de Madrid que cuentan con instalaciones apropiadas para su estancia.
Tras localizar al remitente del paquete en San Fernando de Henares, se procedió a su investigación por su presunta implicación en un delito contra la Flora y la Fauna.
La operación culminaba con la localización por parte del Servicio de Protección de la Naturaleza de un centro en el propio San Fernando, un punto desde el cual se distribuyeron los arácnidos, donde también se intervinieron cuatro lagartos (2 geckos australianos y 2 geckos de cola gruesa), 3 víboras negras, 7 víboras asiáticas y una víbora pitón verde, todos ellos potencialmente peligrosos y que cuyo titular no pudo aportar la documentación de su lícita procedencia.