Una vez más el mal comienzo de las alcalaínas lastra el partido completamente, debido a una salida expectante y muy poco dinámica en defensa que provocaron un juego ofensivo de las cordobesas muy cómodo, logrando culminar con éxito prácticamente todas sus acciones.
Las complutenses llegaron al descanso con ocho tantos en contra que, pese a una mejora de actitud defensiva, amagando la posible remontada, que quedó anulada por cuatro o cinco paradas de calidad de la portera visitante.
Mejor imagen en la segunda parte con acciones de mérito estratégico que permitieron el progresivo acercamiento en el marcador, progresión cortada por los numerosos errores desde los seis metros.
Los numerosos goles de desventaja imposibilitaron alcanzar al que sigue líder de la
clasificación. Iplacea sigue pagando el pato su bisoñez en la categoría, iniciando los enfrentamientos viendo a ver qué pasa. Los rivales lo aprovechan, y las líderes, sin su mejor jugadora, te superan.
El equipo complutense deberá reaccionar ante esta una nueva situación, que ya va siendo habitual, si quieren mantener vivas sus opciones y ofrecer a la numerosa afición presente en sus encuentros, ilusionada con este equipo, el juego que pueden desarrollar. Finalmente oportunidad perdida de dar un golpe encima de la mesa cayendo por 5 goles, con el 25-30 al término, para el Adesal Córdoba.