El Alcalá pudo eliminar al Betis en la Copa del Rey; la hoy centenaria y tristemente devaluada sociedad deportiva alcalaína estuvo a 17 minutos de eliminar a todo un flamante equipo de primera división -y campeón de la Copa del Rey cinco años antes. Y no lo pudo hacer porque jugó treinta y dos minutos con un hombre menos en el estadio Benito Villamarín y porque uno de los míticos jugadores verdiblancos, el internacional español y mundialista Julio Cardeñosa, se marco un hat trick que hizo despertar al Alcalá de su sueño.
La historia de aquel partido del Alcalá, cuando estaba en segunda B y en el top 5 de los equipos madrileños de fútbol se inició el 24 de noviembre de 1982. Era el partido de ida en el estadio municipal del Val y el Alcalá llegaba a la tercera ronda de la Copa del Rey tras eliminar al Talavera y al Atlético Madrileño, filial del Atlético de Madrid. El Alcalá ganó 3-1 en el Val y resistió al filial rojiblanco en el estadio Vicente Calderón. En aquel equipo destacaba el lateral Tomás Reñones, que luego disputo muchos encuentros con el primer equipo colchonero.
El rival del Alcalá en tercera ronda era de postín: El Real Betis Balompié; se presentó en el Val bajo la dirección del técnico húngaro Antal Dunai, que reservó a alguno de sus mejores jugadores pero que con todo y con ello tuvo sobre el césped alcalaíno a jugadores míticos como el guardameta Esnaola, o el delantero internacional español Poli Rincón. También jugó un internacional inglés llamado Peter Barnes y jugadores solventes en primera división como Alex, Canito y Ortega.
El Alcalá estaba entrenado por el exfutbolista del Málaga Antonio Monreal, que se trajo consigo a varios malagueños como Doménech, Javi y Vara. En el partido jugaron alcalaínos como Higes, Pepín y Alfonso Torres, pero destacaba el autor del único gol del partido, el exjugador del Racing de Santander en primera división, Sebas, que a los 27 minutos marcó desde el punto de penalti. Después, el Alcalá defendió con orden y pudo presumir de haber ganado en el Val a todo un equipo de primera división.
La vuelta fue en el Benito Villamarín, el día 8 de diciembre de 1982, día de la Purísima Concepción. El favorito claro era el Betis y esta vez Dunai contó con sus mejores futbolistas; de hecho alineó a su equipo de gala puesto que a los mejores que jugaron en la ida, se unieron Rafa Gordillo, sí, el mítico Gordillo que luego jugó en el Real Madrid. También estaba el internacional Julio Cardeñosa, el del pase a Rubén Cano para que este marcara en el pequeño Maracaná de Belgrado y clasificara a España para el Mundial de Argentina. El mismo Cardeñosa que falló en ese campeonato del mundo un gol cantado ante Brasil. Y el paraguayo Carlos ‘Lobo’ Diarte, que hizo carrera en el Zaragoza, en el Valencia, en el Salamanca y en el Betis, completaba un ataque temible.
No tardó el Betis en empatar la eliminatoria. Lo hizo Ortega a los 11 minutos. El Alcalá se defendía pero no pudo evitar a los 37 minutos el gol de Cardeñosa que ponía al Betis por delante en la eliminatoria. Pero un minutos después Doménech empató la eliminatoria y con el 2-1 se llegó al descanso en el Villamarín.
Sin embargo, en la reanudación un trotamundos andaluz llamado Ramírez marcó el 2-2 para el Alcalá sembrando el desconcierto en las filas del Betis. Era el minuto 58 de partido y los alcalaínos estaban por delante en la eliminatoria.
A los 68 minutos el colegiado riojano Marín López, debutante en primera división esa temporada y con ganas de hacer méritos, expulsó por doble tarjeta amarilla al jugador del Alcalá Totó, otro de los malagueños que se trajo el técnico Monreal.
El Betis se lanzó en tromba oliendo la sangre y el Alcalá poco pudo resistir liderado por Cardeñosa, quien marco el 3-2 que empataba la eliminatoria en el minuto 73 y seis minutos después, en el 79, el definitivo 4-2 que eliminó al Alcalá.
El Alcalá pudo eliminar al Betis en la Copa del Rey pero al menos ver al equipo complutense jugar contra uno de los equipos grandes del fútbol español fue mucho más edificante que ver un Alcalá-Canillas, o un Alcalá-Villanueva del Pardillo esta temporada, o unos previsibles Alcalá-El Álamo o Alcalá-Cala Pozuelo de la próxima.