El espectacular aumento de caudal del Camarmilla a su paso por Alcalá obligó a cortar el puente situado junto al cementerio municipal de San Roque y que está dentro del tramo urbano que une la avenida de Juan Carlos I con la Vía Complutense, por el riesgo a que se anegara la zona.
La realidad es que las alarmantes noticias del 1 de diciembre en Camarma con el desbordamiento del arroyo y con inundaciones que afectaron a 52 viviendas y al colegio, entre otras infraestructuras, llegaron rápidamente a Alcalá. No hay que olvidar tampoco que el parque de bomberos de Alcalá está a muy pocos metros del Camarmilla.
Teniendo en cuentas estos precedentes camarmeños desde la Policía Local de Alcalá se inspeccionó el arroyo a su paso por Alcalá y se pudo comprobar que a la altura del cementerio estaba comenzando a desbordarse.
De forma inmediata se decidió cortar el acceso a ese puente como medida preventiva pero también se procedió a desbrozar de vegetación el cauce del Camarmilla bajo el puente precisamente para conseguir que el agua fluyera sin obstáculos hacia el Henares.
Al mismo tiempo se decidió a consecuencia del corte del puente del Camarmilla y para facilitar el tráfico en hora punta, abrir el sentido Alcalá desde Avenida de Europa a Vía Complutense.
De todos modos, con los primeros trabajos de limpieza realizados se decidió abrir al tráfico esa arteria ciudadana si bien continuaron las labores de limpieza y desbroce.