Alcalá, 12 de abril-. Hoy viernes llega a las salas de cine la nueva película-documental “Hispanoamérica”, del creador y cineasta alcalaíno José Luis López-Linares. Tras el enorme éxito cosechado por su anterior obra “España, la primera globalización”, esta nueva cinta trata de la historia de la América hispana, una historia que -según su creador- conocemos mal porque nos la han contado mal, desvirtuándola durante siglos por medio de tópicos que han ido conformando a lo largo de los siglos lo que conocemos como “leyenda negra”, una visión enormemente sesgada e increíblemente aceptada (aunque cada vez menos) de la historia común de España y América. Es precisamente esta leyenda negra la que ha enturbiado las relaciones entre España y los países hermanos del otro lado del Atlántico y ha impedido que esta relación, que debería ser algo natural, esté contaminada por prejuicios tan falsos como interesados.
Si su anterior película “España, la primera globalización” estaba centrada en describir la gesta casi milagrosa de que España se proyectara al mundo en el siglo XV como la primera potencia que consigue expandirse y consolidarse por un orbe en gran parte desconocido y que además fuera capaz de crear una civilización global que aún perdura, en su obra más reciente López-Linares nos ofrece una visión renovada, veraz y visualmente poderosa de cómo nació y se desarrolló la América Española.
La película comenzó a rodarse en noviembre de 2022 y ha recorrido en su singladura escenarios de múltiples países, como Ecuador, España, Perú, Bolivia, México y Estados Unidos. Con entrevistas a numerosos historiadores y expertos en la materia, sobre todo americanos, la película muestra una nueva visión de la Historia (con mayúscula) compartida durante más de 300 años a través del esplendor visual que constituye el patrimonio arquitectónico, pictórico, escultórico y musical de la época, un patrimonio que aún brilla a día de hoy. Asimismo, cuenta con la participación de lo que podríamos llamar “el pueblo llano”, como el indio o el mestizo que vive en medio de la serva o al borde de un río o de artistas que trabajan manteniendo el riquísimo legado arquitectónico, cultural y religioso de la América hispana.
La obra es enormemente enriquecedora para aquellos que quieran tener una visión real y profunda de la huella española en América y, una vez implantada, de su desarrollo y evolución. España, más en concreto Castilla, llevó a América, ya antes de 1600, las ciudades, los hospitales, las universidades, los puentes y los acueductos. Pero sobre todo llevó la cultura, el catolicismo y la lengua a unos pueblos que vivían en permanente estado de guerra y, algunos de ellos, cruelmente subyugados.
La película nos aclarará conceptos que hará que entendamos mejor nuestra historia y la de los hermanos hispanoamericanos. Así, por ejemplo, aprenderemos a diferenciar entre “colonia”, un asentamiento junto al mar en el que se comercia con productos del interior y con gran cantidad de esclavos y el concepto genuinamente hispano de “mestizaje”, una labor integradora inspirada por la corona de Castilla y en virtud de la cual la propia corona prohibió la esclavitud de los indios y estimuló la creación y desarrollo de nuevos núcleos urbanos en el interior del territorio, todos ellos dotados con los mismos servicios e infraestructuras que tenían las ciudades castellanas.
El Hospital de Antezana, un modelo exportado a la América hispana
Precisamente con el ánimo de dotar de servicios, en este caso sanitarios, a la nueva y creciente población hispanoamericana se crearon hospitales a un ritmo vertiginoso. Obviamente los modelos de hospitales reproducidos en el nuevo mundo fueron los modelos más exitosos ya existentes en las viejas tierras de Castilla y es ahí donde el Hospital de Antezana brilla con luz propia.
La antigua cofradía del Hospital de Nuestra Señora de la Misericordia o de Antezana, fundada por don Luis de Antezana y doña Isabel de Guzmán, según la manera de entender la caridad y la beneficencia durante la Edad Media, estaba compuesta por caballeros hijosdalgos, uno de ellos con el cargo de prioste, en quienes los fundadores dejaron depositada su confianza para que siglo tras siglo su hospital fuera cuidado y mantuviera abiertas sus puertas. Pero el Hospital de Antezana era mucho más que un centro de sanación y recuperación. Era un foco de la ciencia y del saber, pues es probablemente el primer hospital universitario de España, y en él dejó su legado humano y espiritual San Ignacio de Loyola, un ejemplo de vida y dedicación a los más necesitados. No resulta en absoluto extraño que, buscando un modelo hospitalario de éxito en el que inspirarse y trasladar al nuevo mundo, el Hospital de Antezana fuera el modelo ejemplar.
El director
Considerado uno de los mayores exponentes del cine documental español, el cineasta de origen alcalaíno José Luis López-Linares cuenta con una extensa filmografía galardonada con tres Premios Goya, el Premio Ondas y una nominación a los Premios Emmy.
Sus películas, entre las que destacan “Asaltar los cielos”, “Un instante en la vida ajena”, “El Bosco. El Jardín de los sueños” y “Goya, el ojo que escucha”, han participado en festivales de todo el mundo: Cannes, Berlín, Toronto, Venecia, San Sebastián, Guadalajara, Tokio o Tribeca. Además, como director de fotografía, López-Linares ha trabajado con reconocidos cineastas como Carlos Saura, Víctor Erice o Alain Tanner.