Alcalá, 14 de febrero.- Todas las parroquias de Alcalá y otros templos con culto habitual en la ciudad complutense y en toda la diócesis celebran el ritual del Miércoles de Ceniza con la imposición en la cabeza de este símbolo de la cruz que marca el inicio del periodo cuaresmal preparatorio de la Pasión, Muerte y Resurrección de Cristo.
ElPuert@ ha estado en la imposición de la cruz de ceniza en la cabeza de los fieles de la parroquia de Santa María en la misa de 11 presidida por el vicario parroquial Diego Canales, de una parroquia que tiene como titular a Juan Miguel Prim.
El rito de la imposición de la ceniza se celebra tras la homilía. En ella el sacerdote ha explicado que esa ceniza simboliza que no debemos olvidar que lo fundamental es atender la cuestiones importantes de la vida, no lo fútil, el polvo que es la ceniza, que no tiene valor. De ahí que el sacerdote advierta a los fieles que recuerden que “polvo eres y en polvo te convertirás”. El Miércoles de Ceniza da inicio al camino espiritual de penitencia, arrepentimiento y ayuno que marca la Cuaresma para invitar a los fieles a recordar los cuarenta días que Jesús se retiró al desierto en oración y ayuno antes de iniciar su vida pública.
Los cristianos reciben la cruz de ceniza en su frente y suelen mantenerla durante todo el día como una muestra pública de su fe y de su compromiso con la Cuaresma. Durante este período, se invita a los fieles a reflexionar, meditar, orar y realizar actos de caridad para prepararse para la Semana Santa y la celebración de la resurrección de Jesucristo en la Pascua.
Estas cenizas proceden de la quema de las palmas y ramos que han sido bendecidos el Domingo de Ramos del año anterior, rociadas con agua bendita y aromatizadas con incienso.