Tupujume calcula en 12.740 euros lo que le adeuda el Alcalá; la asociación de personas con discapacidad ha abandonado la Deportiva decepcionada por el incumplimiento de los compromisos por parte de la directiva y la propiedad del Alcalá.
Alcalá, 16 de junio.- “Nos ingresaron 4.500 euros y nos dijeron que eran lentejas, o las tomas o las dejas”. Así se ha manifestado el presidente de la asociación de chicos y chicas con discapacidad intelectual Tupujume, Jesús Manuel Soria.
Sin embargo lo peor para los miembros de esta asociación y sobre todo para sus 50 chicos y chicas no es el dinero, que es importante, si no el sentimiento; la ilusión de acudir al campo a animar al equipo con sus tambores ya se ha perdido. Ya no hay vínculo de la asociación con la RSD Alcalá por el incumplimiento de los compromisos.
Entre la deuda anterior y la actual por el impago de las licencias deportivas de los chicos y chicas por los equipos de baloncesto y fútbol, a lo que se comprometió la Deportiva, el montante total era de 19.740 euros. Y eso sin contar otros gastos a los que se comprometió la RSD Alcalá con Tupujume como el alquiler de autobús para desplazamientos que ha tenido que asumir la asociación.
Según Jesús Manuel Soria, presidente obre esa deuda el Alcalá afrontó el pago de los mencionados 4.500 euros con esa premisa: “Son lentejas, o las tomas o las dejas”, dice el presidente que le comentaron al pedir explicaciones.
A esos 4.500 euros se unen 2.500 euros de patrocinio propio de Tupujume. Ese dinero debería haber sido ingresado por la asociación a las cuentas del Alcalá al entender que por formar parte de la estructura de la Deportiva y asumir esta sus gastos era lógico y normal que fueran a sus cuentas. Pero no debieron tener claro en Tupujume el cumplimiento de los compromisos y retuvieron ese dinero antes de ingresárselo al Alcalá. Es decir, entre 4.500 y los 2.500 suman 7.000 euros que restados de los 19.740 dejan un adeudo de 12.740 euros que deberá asumir Tupujume.
Y sin embargo lo más doloroso para la asociación es el sentimiento de dolor que ha dejado esta situación en los 50 chicos y chicas discapacitados. “Nos sentimos engañados, nos han faltado al respeto y se han reído de nosotros”, insiste el presidente de Tupujume.