Alcalá, 26 de febrero.- La árbitra asistente del colegio extremeño Guadalupe Porras Ayuso tuvo que abandonar el campo de juego en el minuto 13 del partido en el Benito Villamarín entre el Real Betis y el Athletic Club de Bilbao. El motivo fue un choque con una cámara de televisión que, sorprendentemente, estaba situada demasiado cerca del terreno de juego. Ha sido la noticia luctuosa de la jornada futbolística de primera división pero tiene también una curiosa conexión complutense: Guadalupe Porras recibió en 2019 el premio de la Federación de Mujeres Progresistas, presidida por la alcalaína Yolanda Besteiro, que fue concejal del PSOE en Alcalá.
El incidente ocurrió justo cuando Chimy Ávila marcaba el primer gol del partido contra el Athletic de Bilbao. Porras Ayuso, que seguía la acción corriendo por la banda, se golpeó con la cámara.
A pesar de que no se emitieron imágenes del incidente durante la retransmisión, se pudo ver cómo varias personas acudían a ayudar a Porras Ayuso. Pocos minutos después, fue evacuada en camilla por la salida más cercana.
Posteriormente, se publicaron imágenes de Porras Ayuso con una herida en la cabeza, resultado del fuerte choque con la cámara. A pesar de la gravedad del corte en su cara y la abundante sangre, Porras Ayuso permaneció consciente en todo momento.
Debido a su incapacidad para continuar en el partido, Porras Ayuso fue sustituida por el cuarto árbitro, Néstor Holgueras Castellanos.
Guadalupe Porras es una figura destacada en el fútbol español. En 2019, se convirtió en la primera árbitra asistente en la máxima categoría del fútbol español, lo que hizo que la Federación de Mujeres Progresistas la premiara con la distinción deportiva en sus premios. En 2021, volvió a hacer historia al ser la primera mujer en arbitrar una final de la Copa del Rey. Su accidente en el campo hoy es un recordatorio de los riesgos que los árbitros pueden enfrentar durante los partidos.
