Alcalá de Henares, 9 de noviembre de 2024.- El juzgado de primera instancia número 68 de Madrid ha celebrado el juicio que enfrenta a Joaquín Leguina contra el partido del que fuera dirigente, el PSOE. Leguina decidió demandar al partido por su decisión de suspenderle de militancia por sus críticas a Sánchez y por su apoyo a Isabel Díaz Ayuso. Ante el juez, Leguina, que reclama al PSOE 18.000 euros por vulneración de sus derechos fundamentales, ha insistido en que el partido está vulnerando su libertad de expresión con una suspensión cautelar ordenada hace dos años por el secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, que para él es una “humillación”. Joaquin Leguina fue el primer presidente de la Comunidad de Madrid ocupando el cargo desde la creación de la institución en 1983 en el marco del estado de las autonomías, y entre 1995 en que fue derrotado electoralmente por Alberto Ruiz Gallardón (PP). Posteriormente fue nombrado en 2001 presidente del Consejo Social de la Comunidad de Madrid permaneciendo en el cargo hasta septiembre de este año en que fue sustituido por el exconsejero de la Comunidad de Madrid, Carlos Mayor Oreja.
La demanda de Leguina se dirige en concreto contra el PSOE, el actual secretario de organización del partido, Santos Cerdán, y la dirigente socialista Marta López Expósito, por vulnerar el derecho fundamental a la militancia y la libertad de expresión. El expediente se abrió en mayo de 2021 contra Leguina y contra Nicolás Redondo Terreros por su apoyo a Isabel Díaz Ayuso en las elecciones madrileñas, según alegó en su día el partido, y se materializó con su suspensión de militancia en diciembre de 2022.
En el juicio, Santos Cerdán ha confirmado que la Comisión Ejecutiva del partido decidió por unanimidad expedientar a Leguina y luego delegó en él este procedimiento, como ocurre en otros procesos, y que se trata de un caso que “no tiene complejidad alguna porque las manifestaciones fueron claras y contundentes”. Según Cerdán, el objetivo del expediente “es expulsarle, no callarle” por unas manifestaciones que suponen a su juicio una falta grave o muy grave por “insultos” a dirigentes y porque “pidió el voto para la señora Ayuso”. En el proceso, ha alegado, “se están respetando sus derechos”.
Sobre las dilaciones en el proceso Cerdán ha afirmado que “ha habido bastante carga de trabajo en el partido”, que no cuenta con un servicio jurídico “demasiado amplio”, y que en cualquier caso él no dio orden de cómo se debía tramitar.
“Está prohibido hablar de todo”
Por su parte Leguina ha denunciado que lleva años en un “limbo” creado por el partido que dirige Pedro Sánchez, quien “ha desbaratado los derechos de los militantes” y carece de objetividad. “Pedro Sánchez nombra todo lo que hay que nombrar y más, este hombre se enfada y dice a éste me lo echáis”, ha añadido, afirmando que ahora en el PSOE “está prohibido hablar de todo” y “no se puede discutir”.