Alcalá de Henares, 11 de noviembre de 2024.- La fiscal del juicio contra el conductor de ambulancias que presuntamente mató por celos a un enfermero del Hospital Príncipe de Asturias de Alcalá de Henares ha elevado a 25 años de cárcel la solicitud de condena al apreciar que concurren en el presunto delito de asesinato las agravantes de ensañamiento y alevosía.
El crimen de Sergio G. se produjo alrededor de la dos de la tarde del 6 de marzo de 2021 en la sala de enfermería del hospital de Alcalá de Henares. Gonzalo R. I., de 42 años, entró armado con el uniforme de conductor de ambulancias y le apuñaló en repetidas ocasiones.
El juicio ha quedado visto para sentencia después de que las partes expusieran sus informes de conclusiones. El Jurado Popular ha recibido hoy por parte de la Sala el objeto del veredicto para su deliberación.
La parte relativa a las responsabilidades civiles se juzgará por separado al producirse el presunto asesinato dentro de un hospital público que pertenece a la Comunidad de Madrid, por lo que el Servicio Madrileño de Salud (SERMAS) es responsable civil subsidiario en caso de condena.
La fiscal solicitaba en su escrito inicial 21 años de condena si bien ha modificado su petición conforme a las periciales forenses que dejaron patente que el agresor se ensañó con su víctima, a quien originó 27 lesiones incisas y penetrantes de carácter mortal.
El agresor degolló a su víctima, quien inmediatamente después cayó al suelo. Pese a ello, siguió apuñalándolo hasta que llegaron varios agentes de la Policía Nacional, que se encontraban en la sala de Urgencias custodiando a un preso.
El pasado lunes, el procesado reconoció que le cortó el cuello por celos y alegó que sufrió un trastorno mental transitorio después de que la víctima le comentara que iba a seguir “violando” a su por aquella época compañera sentimental y a su hija menor.
Sin embargo, las imágenes de las cámaras de videovigilancia desmontan su versión, ya que muestran cómo entró en el hospital buscando a Sergio en varias estancias y sin mediar palabra le ataca brutalmente.
La familia, a través de las dos letradas de la acusación particular, solicita 25 años de cárcel al apreciar las agravantes de alevosia y ensañamiento. La defensa solicita una eximente completa por trastorno mental transitorio o bien una atenuante por arrebato.
En la prueba pericial, los forenses determinaron que el acusado pudo tener las capacidades volitivas alto alteradas pero no las cognitivas, por lo que descartarían una eximente completa por trastorno mental transitorio.
Lo hechos se produjeron el 6 de marzo de 2021 cuando el procesado se vistió con su uniforme de conductor de ambulancia (peto amarillo y uniforme rojo) para acceder al centro hospitalario con la intención de matar a Sergio L. G., quien estaba trabajando como enfermero en dicho hospital.
Una vez en el interior del centro hospitalario, el acusado estuvo merodeando la zona hasta que localizó su objetivo. Sobre las 13:45 horas, justo cuando la víctima se introdujo en la sala de descanso, Gonzalo. R. I. fue detrás de él, “y de forma sorpresiva e inopinada”, comenzó a agredirle con el cuchillo que portaba clavándoselo en repetidas y numerosas ocasiones por distintas partes del cuerpo hasta causarle la muerte.
El acusado se encuentra privado de libertad por esta causa desde el 6 de marzo de 2021. En concepto de responsabilidad civil la Fiscalía le reclama 940.000 euros de indemnización para los familiares del fallecido.