La alcaldesa declarará en el juzgado como investigada el 19 de noviembre. Se muestra tranquila y niega que haya cometido infidelidad en la custodia de documento.
Alcalá de Henares, 10 de septiembre de 2024.- El Juzgado de Instrucción número 2 de Alcalá ha citado a la alcaldesa de Alcalá de Henares, Judith Piquet, a declarar en calidad de investigada el próximo 19 de noviembre por la presunta comisión de una infidelidad en la custodia de documento en relación a la supuesta filtración de dos denuncias de agresiones sexuales que se vincularon a migrantes. Judith Piquet, manifestó el martes 10 de septiembre su tranquilidad con respecto a este asunto y dijo que la alcaldía complutense actúa con “absoluta confidencialidad” en relación a los documentos del Ayuntamiento y acusó al delegado de Gobierno en Madrid, Francisco Martín, de “mentir” acerca de la existencia de “unas agresiones sexuales”.
En el auto de citación la jueza llama a declarar también al jefe de prensa del Ayuntamiento de Alcalá y a testificar al jefe de la Policía Local de Alcalá. La alcaldesa confía en que se archive el procedimiento judicial.
La causa, en la que el PSOE ejerce la acusación popular tiene que ver con la polémica creada a mediados del mes de enero cuando Piquet aseguró en varias intervenciones públicas que existían dos denuncias por agresión sexual sin autor conocido en las que se refería que el responsable es “un varón negro y joven”. Lo hizo después de que la presidenta regional, Isabel Díaz Ayuso, celebrara en Alcalá el Consejo de Gobierno para arropar a la alcaldesa tras unos graves altercados registrados entre inmigrantes trasladados por el ejecutivo central desde Canarias al Centro de Acogida, Emergencia y Derivación (CAED), ubicado en el acuartelamiento Primo de Rivera.
La presidenta aseguró en la rueda de prensa tras el Consejo de Gobierno que en el municipio se habían producido, en el cuartel Primo de Rivera donde están ubicados los migrantes, “varias reyertas graves” y aseguró que ha habido “agresiones sexuales a algunas mujeres del municipio, según han denunciado”. A estas palabras contestó el delegado del Gobierno en Madrid, Francisco Martín, quien negó horas después la existencia alguna de agresiones sexuales realizadas por migrantes y consideró de “extrema gravedad mezclar migración con inseguridad”. “Lo que dijo la presidenta no tiene nada que ver con la realidad, ni con la objetiva ni con la subjetiva. Son dañinos, generan alarma y van en contra de la convivencia. No están acreditados por los datos”, remarcó el delegado del Gobierno. Tras ello, el secretario general del PP de Madrid, Alfonso Serrano, hizo público en su cuenta de la red social X, antes Twitter, un informe de incidencia de la Policía Local de Alcalá de una de las dos denuncias y en el que se hablaba de un intento de agresión. Ese el asunto fundamental por el que se investiga a Judith Piquet por la presunta infidelidad en la custodia de documento y que según el PSOE complutense conllevaría en caso de ser condenada, una inhabilitación para el ejercicio de la función pública de entre 1 y 3 años.
Tranquilidad de la primera edil
Según la alcaldesa complutense “lo único que hay es una citación para ir a declarar al juzgado. No hay más. Es una denuncia del Partido Socialista que supongo que tiene que ver con la noticia relacionada con un procedimiento con el antiguo comisario de Policía Local, que dejó la jefatura de servicio cuando entró un comisario nuevo, y que intenta mezclar su asunto personal o laboral con otros asuntos políticos, aquí todo el mundo ha intentado mezclar todo”.
“Lo que me llama la atención es que esta información ha salido después de que el lunes se anunciara una comisión de investigación para saber qué ha pasado con el dinero de los alcalaínos que ha llegado a las familias de los concejales del Partido Socialista cuando gobernaban esta ciudad”, añadió Judith Piquet que afirmó al respecto que “estoy tranquila. No ha habido filtraciones desde el Ayuntamiento y lo demostraremos. Estoy convencido de que el asunto se quedará en nada”, dijo para concluir con que “el Ayuntamiento de Alcalá tenía razón y el único que mintió acerca de que existían unas agresiones sexuales fue el propio delegado del gobierno”.