Alcalá de Henares, 16 de marzo de 2025.- La guerra en el Corredor del Henares de los Trinitarios y los Dominican Don’t Play se encuentra larvada por las operaciones policiales. Esto hace que ambas organizaciones criminales con sede en Alcalá y Torrejón de Ardoz mantengan un perfil bajo en estos momentos, pero es una realidad que puede explotar en cualquier momento.
Mientras se vive este perfil bajo las bandas juveniles no han cesado su actividad de reclutamiento de nuevos jóvenes para conformar ‘ejércitos’ cada vez más potentes, amplios y disciplinados que permitirán el ascenso de jóvenes cada vez más experimentados para ejercer como mandos intermedios en organizaciones criminales que son muy jerárquicas. En ese sentido las bandas utilizan a menudo comportamientos muy parecidos a los de la mafia siciliana, la camorra napolitana y la ‘Ndrangueta calabresa, que con trayectorias criminales, económicas, políticas y sociales de más de un siglo ponen a menudo en jaque al estado italiano con su poder. Y eso es lo que precisamente quieren evitar los cuerpos y fuerzas de seguridad del estado.
Ese reclutamiento constante tiene un enorme universo juvenil. Las bandas no buscan a sus futuros miembros entre emigrantes de países hispanoamericanos, ni tampoco entre jóvenes de barrios marginales. Cuando se habla hoy de bandas latinas se emplea el genitivo por el origen y no por su actual composición. De hecho hay en estos momentos componentes de bandas latinas que son españoles y de familias españolas, pero también de jóvenes pertenecientes a familias de inmigrantes procedentes de países del este, y también magrebíes e incluso subsaharianos.
Y todavía más llamativo: En las detenciones llevadas cabo en Alcalá en 2021 y 2022 había jóvenes miembros de familias de clase media y no precisamente con bajo nivel adquisitivo, cuyos padres desconocían que sus hijos formaran parte de estos grupos criminales, que lo negaban hasta que los investigadores les mostraron pruebas fehacientes.
Las señales de alarma
Esto hace que las familias deban tener una especial atención sobre las actividades de sus hijos, sean chicos o chicas, para evitar que puedan tener contactos con estos grupos criminales que pueden arruinarles sus vidas.
El Observatorio de Bandas Latinas del Centro de Ayuda Cristiana advierte de algunas de las señales de alarma que se pueden detectar en la familia.
Cambios de comportamiento del joven
- – Disminución de su rendimiento escolar
- – Absentismo escolar sin motivo aparente o con excusas
- – Evitar salir con sus amigos de siempre
- – No ir a actividades extracurriculares
- – No pasar tiempo en familia
- – Mayor rebeldía o con un temperamento atípico
- – Quedarse hasta tarde fuera de casa
- – Encerrarse en su habitación
- – Ocultar sus cosas
- – Irritabilidad o ira excesiva y frecuente, volviéndose agresivo
- – Modificar su forma de pensar sobre ideas que antes defendía
- – Cambio de actitud o motivación respecto a las actividades que antes realizaba, como deportes, cursos o creencias
- -No querer presentar a sus nuevas amistades
- – Posesión de armas
- – Tener repentinamente dinero u objetos caros que no ha conseguido de su trabajo, de los padres o de familiares, y de los cuales no quiere dar explicación o ésta no es creíble
- – Posesión de drogas o sospecha de su consumo
- – Aparición frecuente de heridas, cortes, moratones en rostro, manos, nudillos
- – Dibujar constantemente un signo o gesto
- – Escribir un número específico que repite en todas sus posesiones
- – Cambiar de forma de vestir
- – Analizar con quién y cómo se comunica en las redes sociales
- – Analizar las letras de las canciones con las que se siente identificado y qué comportamientos pueden acarrear
Factores de riesgo en los centros educativos
- – Dificultades de adaptación al contexto escolar
- – Bajo rendimiento/fracaso escolar
- – Baja expectativa de finalización de los estudios
- – Dificultades para asumir la autoridad desobedeciendo con una actitud provocadora, oposicionista y desafiante
- – Falta de interés por la actividad formativa
- Absentismo frecuente
- No realizar actividades de ocio personalmente productivas
- – Baja autoestima
- – Búsqueda de identidad, afecto, sentimiento de pertenencia, respecto, status
- – Necesidad de protección
- – Necesidad de aceptación: huida de la soledad, humillación de ser ignorado
- – Sentimiento de incomprensión
- – Falta de habilidades sociales, de relación y comunicación
- – Actitudes agresivas
- – Consumo de sustancias tóxicas de forma habitual