Alcalá de Henares, 24 de julio de 2024.- El ahogamiento es una de las principales causas de muerte a nivel mundial para niños y jóvenes de 1 a 24 años y se estima que en 2019 murieron 236.000 personas por ahogamiento.
Más del 90% de las muertes por ahogamiento ocurren en países de bajos y medianos ingresos, y los niños y las niñas menores de cinco años corren el mayor riesgo. Con frecuencia, estas muertes están relacionadas con actividades rutinarias, como bañarse, recolectar agua para uso doméstico, viajar sobre el agua en botes o transbordadores y pescar. Los impactos de los eventos climáticos estacionales o extremos, incluidos los monzones, también son una causa frecuente de ahogamiento.
Factores de riesgo:
Edad: A escala mundial, los índices de ahogamiento más elevados corresponden a los niños de 1 a 4 años, seguidos de la franja de edad de 5 a 9 años. Por ejemplo, en los Estados Unidos el ahogamiento es la segunda causa de muerte por traumatismo no intencional entre 1 y 14 años de edad.
Sexo: Los varones están especialmente expuestos al riesgo de ahogamiento, con un índice global de mortalidad que duplica el de las mujeres. También tienen más probabilidades que las mujeres de ser hospitalizados por un episodio de ahogamiento no fatal. Los estudios indican que ello se debe a una mayor exposición al agua y a prácticas más arriesgadas, como los baños en solitario, consumir alcohol antes de nadar, o por la navegación.
Acceso al agua: Tener mayor acceso al agua es otro factor de riesgo. Las personas que se dedican a la pesca, ya sea industrial o de subsistencia, están más expuestas al ahogamiento, tanto más si utilizan botes pequeños, como ocurre en los países de ingresos bajos. Los niños que viven cerca de puntos o cursos de agua al aire libre (acequias, estanques, canales de irrigación, piscinas) corren especial peligro.
Inundaciones catastróficas: Los ahogamientos suponen el 75% de los fallecimientos que se producen a resultas de inundaciones catastróficas. Estos fenómenos se producen cada vez con más frecuencia e intensidad, una tendencia que se espera que se mantenga en el futuro como parte del cambio climático. El riesgo de ahogamiento aumenta en caso de inundación sobre todo en los países de ingresos bajos y medianos, donde las personas viven en zonas expuestas a las inundaciones y la capacidad para alertar, evacuar o proteger a la población en caso de inundación es escasa o incipiente.
Viajes por médio acuático: A menudo los trayectos cotidianos desde y hacia el lugar de trabajo, así como los viajes de migrantes o solicitantes de asilo, tienen lugar en embarcaciones sobrecargadas, poco seguras y carentes de material de seguridad, o pilotadas por personas que no tienen la formación necesaria para navegar ni para reaccionar en caso de un incidente. El personal que trabaja bajo los efectos del alcohol o de drogas representa un factor añadido de riesgo.
Otros factores de riesgo:
– El hecho de dejar a un lactante desatendido o con otro niño en las proximidades del agua.
– Consumo de alcohol cerca o dentro del agua.
– Ciertas enfermedades, como la epilepsia.
– Turistas no familiarizados con los riesgos y las particularidades de las aguas locales.
Prevención
La mayoría de estas muertes se pueden prevenir mediante soluciones de bajo costo basadas en evidencia, como:
. Instalación de barreras que controlan el acceso al agua
. Proporcionar lugares seguros lejos del agua, como guarderías para niños en edad preescolar con cuidado infantil capacitado
. Enseñar natación, seguridad en el agua y habilidades de rescate seguras
capacitar a los transeúntes en rescate y reanimación segura
establecer y hacer cumplir normas seguras de navegación, transporte marítimo y transbordadores
-.Mejorar la gestión del riesgo de inundación