Alcalá de Henares, 18 de noviembre de 2024.- La Delegación del Gobierno en Madrid ha comunicado por correo electrónico al ejecutivo autonómico el incremento en 510 plazas en los centros temporales de acogida para migrantes trasladados desde Canarias de Carabanchel y Alcalá de Henares, un aumento de capacidad en 400 y 110 estancias, respectivamente, que, según la Comunidad, “agravará” la situación de “saturación” que ya registran en la actualidad.
En respuesta al correo electrónico enviado por el delegado de Gobierno en Madrid, Francisco Martín, el consejero de Presidencia, Justicia y Administración local y portavoz del Gobierno regional, Miguel Ángel García Martín, ha mostrado su “indignación” y le ha reiterado su preocupación por la “saturación de esos macro-campamentos” que, según los cálculos estimados del Gobierno regional, “suman más de 3.210 plazas”.
Estos centros son el Cuartel General Arteaga, ubicado en el barrio de Carabanchel de la capital, con capacidad inicial para hasta 1.200 plazas, y del acuartelamiento Primo de Rivera, situado en Alcalá de Henares, con una capacidad máxima de 1.100 personas, que el Ministerio de Defensa cedió en Madrid para acoger a migrantes, ante el desbordamiento de las instalaciones ubicadas en Canarias concebidas para este propósito.
Así las cosas, el consejero de Presidencia ha solicitado al delegado de Gobierno conocer el número de plazas totales habilitadas en estos dos centros, así como en el de refugiados de Pozuelo de Alarcón, y en el resto de lugares habilitados, y el número de las personas que ya han pasado por los mismos desde su puesta en marcha.
En este sentido, ha incidido en que le “resulta paradójico y cínico” que la Delegación del Gobierno cuestionara desde el primer momento la puesta en marcha del centro de La Cantueña en Fuenlabrada, con 99 plazas, “perfectamente ajustada a los requerimientos legales”, cuando desde el Gobierno de Pedro Sánchez “siguen ampliando plazas en estos macro-campamentos sin ninguna previsión”.
Asimismo, le ha pedido que le traslade las actuaciones que el Gobierno va a llevar a cabo para “poner freno a la grave crisis migratoria” a través de la llamada ruta canaria, y de forma particular, a través de Madrid-Barajas. Además, ha solicitado al Ejecutivo que llegue a acuerdos con los países en origen y con la Unión Europea para poner “medidas reales” que permitan un control de la inmigración irregular que llega al país.