Alcalá de Henares, 18 de noviembre.- El Centro de Acogida de Inmigrantes habilitado en la parcela del cuartel Primo de Rivera ya alcanza las 1.700 plazas con una ampliación del mismo establecida por el gobierno de España y comunicada por la Delegación del Gobierno en Madrid a la Comunidad de Madrid. Son otras 110 plazas más. Comenzó hace ahora un año con 1.134 y ya llega a las 1.700 plazas tras las sucesivas ampliaciones, que no tienen viso de parar.
Judith Piquet, ha explicado en el programa ‘Buenos Días Madrid’ de la cadena Telemadrid la complicada situación por la que atraviesa el Centro de Acogida de Emergencia y Derivación de inmigrantes (CAED) instalado por el Gobierno de España en el recinto de la Base Primo de Rivera de la ciudad, tras su decisión de ampliar, sin previo aviso de nuevo, su capacidad en otras 110 personas. La alcaldesa ha expresado su malestar y su crítica ante una decisión que supone toda una “deslealtad institucional” por parte de la Delegación del Gobierno. “Desde que se abrió este centro, que dijeron que era temporal, han pasado por allí más de 7.000 personas, según sus propios datos”, ha indicado Piquet.
Piquet ha señalado que con este incremento “tenemos un campamento de 1.700 personas inmigrantes que duermen y se asean en carpas, que no tienen las dotaciones adecuadas y que viven hacinadas. Esta población equivale a un barrio entero sin ninguna prestación ni servicio por parte del Gobierno de España. Los tratan como mercancía y las responsabilidades son para todos los demás”.
Las condiciones de vida de esta población inmigrante no se ven, se queja la regidora, pero tienen consecuencias para el día a día en el resto de la ciudad. “Son personas que deambulan por nuestras calles sin nada que hacer, que se quedan a dormir en los parques o que a veces se pelean en plena vía pública”, ha señalado Piquet, que critica además la opacidad informativa en torno a la situación del centro, mencionando el ejemplo de un suceso luctuoso ocurrido en las últimas semanas: “Sabemos que falleció un interno, pero no nos han explicado los motivos. Sabemos también que se produjo una huelga de hambre y un motín en protesta por las condiciones de vida en el centro y tuvieron que intervenir cinco patrullas de nuestra Policía Local para sofocarlo. Y aunque he pedido por carta información de todo ello al delegado del Gobierno, no hemos tenido respuesta alguna”.
Un plan de seguridad e integración
También se le ha preguntado por escrito a la delegación y al Ministerio de Inclusión Social, Seguridad Social y Migraciones, del que depende el CAED, si esta instalación va a ser temporal, como se anunció hace un año, o si va a seguir ampliándose su capacidad cada cierto tiempo, como está sucediendo hasta hora. “Sólo nos han dicho en declaraciones públicas que relacionamos inmigración y seguridad. Nos han llamado de todo por solicitar un plan de seguridad y de integración y pedir que exista coordinación y que no traten a estas personas como mercancías”.
Piquet ha apostillado que seguirá reclamando soluciones al Gobierno central para este centro y, ante todo, respeto para Alcalá y sus vecinos: “Insisto en que queremos lealtad institucional, que se nos dé información a los ayuntamientos, que el Gobierno se haga cargo de sus competencias y acabe con este caos migratorio”.